Trabajadores del Área Sanitaria Este de Málaga-Axarquía denuncian la gestión durante la DANA que azotó la provincia

22.11.2024

El comunicado emitido por el SAE recoge que la Dirección Gerencia emitió requerimientos para que el personal acudiera a trabajar, bajo amenazas de sanciones económicas y la apertura de expedientes informativos

Los trabajadores del Área de Gestión Sanitaria Este de Málaga-Axarquía (AGSEMA) han manifestado su indignación ante la Consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, el Director General de Personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y el Gerente del SAS. La causa: las actuaciones de la Dirección Gerencia del centro tras la emergencia meteorológica provocada por la reciente Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que afectó gravemente a la provincia de Málaga y, en particular, a la comarca de la Axarquía.

Tal y como recoge el comunicado emitido por el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE), el malestar surge tras las instrucciones emitidas el 13 de noviembre, un día después de que la Secretaría General de la Administración Pública publicara una nota informativa y una resolución que apelaban al sentido común y a la seguridad de los profesionales durante el fenómeno meteorológico adverso. A pesar de estas directrices, los cargos intermedios del AGSEMA recibieron instrucciones para identificar con nombres, apellidos y categorías a aquellos trabajadores que no pudieron acudir a sus puestos.

Los empleados denuncian que esta medida ignora las normativas de prevención de riesgos laborales y contradice tanto la resolución previa como las declaraciones públicas de responsables políticos que instaban a actuar con prudencia.

Organización previa versus presión gerencial

Según los profesionales afectados, los jefes de servicio, supervisores y otros cargos intermedios habían anticipado posibles contingencias derivadas de la situación de alarma meteorológica, organizando el trabajo y al personal de forma responsable. Sin embargo, la Dirección Gerencia emitió requerimientos para que el personal acudiera a trabajar, bajo amenazas de sanciones económicas y la apertura de expedientes informativos.

"Esta situación ha generado un clima de persecución y amenaza entre los trabajadores, que no solo se vieron afectados por la emergencia climática, sino que ahora enfrentan una presión injustificada", señalaron los representantes del personal.

Reclaman un plan de contingencias

Los trabajadores consideran que lo ocurrido pone de manifiesto la falta de previsión ante situaciones de emergencia. Solicitan la elaboración urgente de un plan de contingencias que garantice tanto la continuidad del servicio como la seguridad del personal en eventos extremos como el de la pasada DANA.

Esta demanda subraya la necesidad de una mejor coordinación entre las directrices administrativas y la gestión local de recursos, evitando futuras situaciones de tensión que afecten tanto a los empleados como a la atención sanitaria de la población.

El suceso abre un debate sobre la protección de los derechos laborales y la gestión de los servicios esenciales en contextos de emergencia. Por su parte, la Consejería de Salud aún no se ha pronunciado oficialmente al respecto.