Pelea con medio centenar de personas en Riogordo tras las amenazas de un vecino con una escopeta
Los agentes tuvieron que abandonar el lugar para salvaguardar su integridad física debido a la agresividad de la multitud, aunque finalmente arrestaron al presunto autor

Una pelea con al menos medio centenar de implicados ocurrida en Riogordo se saldó este pasado fin de semana con varios heridos y un detenido que, tras marcharse del local, regresó armado con una escopeta, aunque no llegó a abrir fuego, tal y como recoge Málaga Hoy.
Una multitud de personas recibieron con una agresividad a la patrulla de la Guardia Civil que acudió y que tuvieron que abandonar la zona para salvaguardar su integridad física. Hubo lanzamiento de botellas y vasos, según han informado fuentes policiales.
Un aviso alertaba a la Guardia Civil en torno las 5 de la madrugada del sábado al domingo de que se estaba produciendo una riña multitudinaria en la que participaban unas 50 personas. Una de ellas portaba una escopeta de la marca Franchi de calibre 12, ya preparada para disparar. La investigación apunta a que el dueño del arma era un vecino que volvió con ella al pub con la supuesta intención de usarla por rencillas vecinales.
Los testigos no se amedrentaron. Según las pesquisas, trataron de linchar al individuo, de 42 años, que portaba la escopeta. Los agentes que acudieron hasta allí comprobaron que el grupo pretendía agredirle tanto a él como a su pareja sentimental. El hombre, precisan las fuentes, estaba acorralado. La crispación del ambiente dio lugar a que los efectivos, pertenecientes al puesto de Casabermeja, tuvieran que recibir apoyo de otra patrulla de la Guardia Civil del Puesto de Colmenar, municipio colindante. Así lograron proteger al individuo, que fue detenido por un presunto delito de tenencia ilícita de armas.
Además de arrestar a este hombre, uno de los supuestos participantes en la riña, le intervinieron la escopeta que llevaba, municionada y lista para disparar. Los agentes, durante el cacheo que le practicaron, encontraron también tres cartuchos del mismo calibre.
Fuentes policiales han detallado que, debido a la grave alteración del orden publico, con lanzamientos de botellas y vasos de cristal, la Guardia Civil tuvo que abandonar el lugar junto al detenido y la pareja de éste, para, de esta forma, salvaguardar su integridad física.