en-Cinco toneladas de hachís intervenidas en Málaga, Cádiz y Almería
Detenidas ocho personas como integrantes de una de las más importantes y activas organizaciones delictivas dedicadas a la introducción de sustancias estupefacientes en España

La Guardia Civil, en la que se ha denominado operación BUSYCON, ha detenido a ocho personas como integrantes de una de las más importantes y activas organizaciones delictivas dedicadas a la introducción de grandes cantidades de sustancias estupefacientes en nuestro país, interviniéndose cerca de 5.000 kilos de hachís.
Fruto de la inteligencia obtenida en los cauces habituales de obtención y elaboración de información, así como de colaboración policial, agentes del Equipo Contra el Crimen Organizado de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil con sede en Málaga, tuvieron conocimiento a mediados del pasado año, de la existencia de una organización delictiva dedicada al transporte de grandes cantidades de hachís desde Marruecos a España y posteriormente distribuido a distintos países europeos.
Iniciada así la investigación, los agentes centran la misma en una serie de personas de distintas nacionalidades; española, marroquí e italiana, los cuales podrían estar iniciando los contactos necesarios para la compra de una gran remesa de estupefaciente e introducirla en España por vía marítima. De la misma manera, los investigadores pudieron conocer como este grupo delictivo podría haber introducido el citado alijo en las costas andaluzas en los últimos días, siendo entregado de manera inminente a otra parte de la organización para su distribución.
Actuaciones en las provincias de Cádiz, Almería y Málaga
Estando sometida esta parte del grupo a una estrecha y discreta vigilancia, la mañana del pasado domingo se pudo interceptar el intercambio de la sustancia estupefaciente en la localidad gaditana de Conil de la Frontera, donde se procedió a la detención in fraganti de varias personas relacionadas con estos hechos. Estas detenciones, rápidamente trasladaron la actuación de los agentes a las provincias de Málaga y Almería, llevándose a cabo varios registros domiciliarios en las localidades malagueñas de Marbella y Estepona, donde se produjeron más detenciones e intervinieron más de 200.000 € en metálico, joyas, vehículos y abundante material informático y tecnológico de interés para la investigación.