Cuatro heridos y dos detenidos tras una violenta pelea en Colmenar

Entre los heridos se encuentran un agente de la Guardia Civil fuera de servicio, su esposa y dos vecinos que intentaron mediar en el altercado 

Una violenta pelea ocurrida en la madrugada del pasado viernes 2 de mayo frente al cuartel de la Guardia Civil de Colmenar (Málaga) ha dejado cuatro personas heridas y ha terminado con la detención de dos hombres, de origen colombiano y residentes en la localidad. Entre los heridos se encuentran un agente fuera de servicio, su esposa y dos vecinos que intentaron mediar en el altercado.

Según fuentes consultadas por Diario SUR, el conflicto comenzó horas antes en un restaurante local, donde los dos detenidos habrían consumido abundante alcohol. Posteriormente, se desplazaron a otro bar del municipio, donde, presuntamente, comenzaron a incomodar a varias mujeres. Testigos relatan que llegaron a echar whisky en las copas de las clientas sin su consentimiento, lo que provocó el reproche de un familiar de una de ellas. Ante la tensión creciente, los responsables del establecimiento expulsaron a los hombres, que salieron visiblemente alterados y permanecieron merodeando en los alrededores.

Fue entonces cuando la situación se agravó. Uno de los individuos hizo un gesto que hizo pensar que portaba un arma, y otro cliente del bar intervino para apartarlos. La respuesta de los detenidos fue lanzar objetos —entre ellos sillas y una maceta— y emplear un cúter contra quienes trataban de calmar la situación.

Durante la pelea, un vecino recibió un fuerte golpe en la cabeza con una maceta, lo que obligó a su traslado urgente al Hospital Regional de Málaga con un traumatismo craneal y una herida que requirió varios puntos de sutura. El agente de la Guardia Civil, que se encontraba fuera de servicio, sufrió un corte superficial en el cuello, mientras que su esposa recibió una patada en el pecho y un corte en la mano que afectó a tres dedos. Un cuarto herido presentó una herida por arma blanca, aunque de carácter leve.

Ante la gravedad del incidente, se movilizaron patrullas de la Guardia Civil de los municipios cercanos, que lograron detener a los presuntos agresores esa misma noche. Vecinos y hosteleros del pueblo han expresado su hartazgo, asegurando que no es la primera vez que estos individuos se ven implicados en episodios violentos en la zona.